martes, 2 de marzo de 2010

EL COMPROMISO, FACTOR CLAVE PARA EL ÉXITO DE LA EMPRESA

Contrariamente a lo que se puede pensar el compromiso de las personas con la empresa no tiene que materializarse necesariamente en una fidelidad ciega a la misma. El compromiso con la empresa, por parte de las personas, tiene que materializarse en que éstas tengan los comportamientos necesarios para conseguir los objetivos de la empresa o lo que es lo mismo el éxito. El talento de las personas es, hoy en día, el factor más estratégico en la empresa, la tecnología y el capital están al alcance de cualquier buena empresa, pero el talento es cada vez más difícil de atraer y más difícil de retener por dos razones básicas, en primer lugar porque cada vez escasea más y en segundo lugar porque las actuales condiciones del empleo hacen que sea más volátil por cosas tales como reducciones de plantilla, inseguridad en el mantenimiento de los puestos de trabajo, jubilaciones anticipadas, incrementos salariales con márgenes muy estrechos, dificultades para compaginar la vida familiar con la vida laboral y así hasta un largo etcétera que hacen difícil que el talento se estabilice en la empresa. Sin embargo la empresa necesita el talento como elemento indispensable para su éxito, entendiendo como tal el producto de las capacidades de las personas multiplicado por su compromiso con la empresa y es este último componente del talento, el más afectado por todas las circunstancias apuntadas en el párrafo anterior. Es decir, hoy en día, es más difícil conseguir el compromiso de las personas con la empresa que las capacidades de las mismas y si el primero no existe las capacidades valen para muy poco, por no decir para nada. No solo en la empresa, en el deporte y más concretamente en el fútbol tenemos, hoy en día, buenos ejemplos de lo que se puede conseguir cuando además de capacidad hay compromiso y también cuando ocurre lo contrario. Por tanto el compromiso de las personas con la empresa es, sin duda alguna, el factor más decisivo para el éxito de la misma, pero llegado a este punto la cuestión básica es cómo se consigue el compromiso de las personas con la empresa. El compromiso en la empresa se consigue cuando se dan, al menos, cuatro condiciones, a saber:
Contrariamente a lo que se puede pensar el compromiso de las personas con la empresa no tiene que materializarse necesariamente en una fidelidad ciega a la misma.
• Que las personas se sientan satisfechas en su puesto de trabajo.
• Que las personas se sientan a gusto e integradas en la organización.
• Que haya un buen liderazgo en la empresa.
• Que haya una buena comunicación. Para conseguir todo esto se requieren dos cosas, buenos jefes y las políticas de Recursos Humanos de la empresa que apoyen la labor de estos jefes. Me explico, en las dos primeras condiciones el clima de la organización influye poderosamente y este clima, en su mayor parte lo generan los jefes. Estoy harto de ver empresas con mal clima en general y sin embargo ver departamentos con un microclima, generado por el jefe, excelente y también el caso contrario. Las dos segundas dependen exclusivamente diría yo, de la calidad de los jefes porque el liderazgo no es algo exclusivo de la alta dirección, sino que es necesario que exista a todos los niveles, en la cumbre de la pirámide, en el medio y en la base y en cuanto a la comunicación, solamente decir que está comprobado, fehacientemente, en multitud de estudios que la comunicación que las personas valoran más es la de su jefe directo. Tal vez es bueno matizar que jefe es toda aquella persona que tiene colaboradores o personas de cuyo trabajo es responsable, como ya he dicho los jefes están en el vértice de la pirámide, pero también en el medio y en la base de la misma. En consecuencia la responsabilidad de conseguir el compromiso de las personas con la empresa es de todos los jefes, sin excepción, con la ayuda de unas políticas y unas prácticas de Recursos Humanos que les apoyen para ello. Pero aún voy a decir más, los jefes tienen que influir de una manera casi decisiva, para que estas políticas y estas prácticas sean las adecuadas. El compromiso de las personas es lo que verdaderamente permite, en la empresa, transformar el potencial de la misma en resultados. Por ello sin compromiso no hay futuro ni éxito para las empresas.

Vicente Blanco, director de Eurotalent Publicado en la Revista Interna de la Fábrica de Unilever en Leioa, en junio de 2007

No hay comentarios:

Publicar un comentario