miércoles, 3 de marzo de 2010

LECCIONES DEL ECOSISTEMA

El espíritu del Bosque es una película española de animación en 3D dirigida por David Rubín y Juan Carlos Pena, continuación de El Bosque Animado. La obra de Wenceslao Fernández Flórez, tierna y divertida escrita en plena posguerra, se adaptó al cine por José Neches en 1945 y más recientemente en 1987, dirigida por José Luis Cuerda, con gran éxito (Goya a la mejor película, al mejor actor –Alfredo Landa-, al mejor guión – Rafael Azcona–, a la mejor música original y al mejor diseño de vestuario). En 2001, la productora gallega Dygra realizó una versión animada en 3D que obtuvo dos premios Goya y fue traducida a 21 idiomas.
En esta secuela, el topo Furacoyos (Furi, para sus amigos), sus compañeros los animales y los árboles de la fraga (el bosque gallego) de Cecebre se enfrentan al peligro de un hombre de negocios que quiere construir una urbanización y la Señora d’Abondo que desea aprovechar esta ocasión para hacer una carretera y cargarse el bosque. Ni Furi, ni su amiga Linda (con la voz de María Adánez), ni el ratón Piorno, ni el topo urbanita Cebolo (Luis Merlo) ni las moscas Hi-Hi y Ho-Ho (las voces de “Trancas” y “Barrancas” del programa de televisión “El hormiguero”) ni la gata Morriña ni “el clan de los gatos libres” se resisten a su suerte. Furi apela al alma, al “espíritu del bosque”, para salvar la fraga.
Lo que niños y mayores aprenden en esta aventura ecológica producida por Manolo Gómez y distribuida por Manga Films es el valor de un ecosistema. El Diccionario de la Real Academia define ecosistema como “comunidad de los seres vivos cuyos procesos vitales se relacionan entre sí y se desarrollan en función de los factores físicos de un mismo ambiente.” Un ecosistema es sostenible cuando puede mantenerse por sí mismo.
La fraga que presenta esta película, con el viejo Carballo (el roble) es, evidentemente, un ecosistema. Una empresa no es una máquina, como algunos creen erróneamente, sino un ecosistema, una comunidad de seres vivos interrelacionados. Un sector es un ecosistema. Una ciudad es un ecosistema. Un país es un ecosistema. Y el planeta en su conjunto, también lo es.Lo que niños y mayores aprenden en esta aventura ecológica, 'El espíritu del Bosque', es el valor de un ecosistema. Cuando se piensa y se actúa como un ecosistema, hemos de comprender las interrelaciones y la búsqueda de sinergias para la supervivencia colectiva.
Fácil de decir, difícil de hacer. Cuando se piensa –y se actúa– en término de ecosistema, hemos de comprender las interrelaciones, la interdependencia y la búsqueda de sinergias para la supervivencia colectiva. Por ejemplo, el XXII Encuentro de las Telecomunicaciones celebrado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (Palacio de la Magdalena, Santander) durante la primera semana de septiembre se ha titulado “Hacia un nuevo ecosistema”. Se refería a la convergencia de las telecomunicaciones y las tecnologías de la información con la televisión y el entretenimiento. Un sector, como puso de manifiesto el ministro Miguel Sebastián en la apertura del Encuentro, deflacionario y muy competitivo.
Sin embargo, según los expertos que allí acudieron, no se habló realmente de un ecosistema, de lo que nos enseña la biología y este “espíritu del bosque”, sino de rivalidades a ultranza, regulación y desaparición de los aparentemente más débiles. La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) anunció el 31 de julio que Telefónica no está obligada a alquilar su red de fibra óptica a sus rivales. Vodafone, Orange o Jazztel tendrán que invertir en sus propias redes para dar los mismos servicios. El “Encuentro” se convirtió en desencuentro. César Alierta, Presidente de Telefónica (principal patrocinador del evento, a través de su Fundación) desistió asistir. Vodafone, que hace unos meses compró la filial española de Tele 2, comentó a través de su Presidente, Francisco Román, que su compañía ha invertido 786 millones de euros en 2007, sobre un total de 2.000 millones de todas las compañías de móvil y que si no se obtiene al menos un 40% de cuota, no es rentable invertir. Orange (France Télécom) ha anunciado que recurrirá ante la Audiencia Nacional la decisión de la CMT, porque la fibra de Telefónica no es absolutamente nueva, sino legada (en parte) del monopolio público. Según McKinsey, se necesitan unos 250.000 millones de euros para desplegar una red de fibra de primera en toda la Unión Europea.
Sí, Charles Darwin nos enseñó en El origen de las especies la supervivencia del más apto, del que mejor se adapta. Pero no necesariamente el triunfo del más fuerte, puesto que son los animales y las plantas que mejor generan simbiosis, que mejor obtienen sinergias, las que prevalecen. De hecho, a Darwin le fascinaba el caso de las abejas, con una estructura coherente (obreras, reina) que muestra generosidad y perspectiva. Potenciar un ecosistema para que sobreviva requiere de inteligencia social: de visión de futuro, de generosidad, de valentía, de serenidad y de optimismo.
Entretanto, unas empresas TIC se pelean con otras, unas comunidades autónomas se enfrentan con otras por asuntos de financiación, unos partidos discuten y descalifican a otros por una crisis que nos afecta a todos. Si seguimos así, nos talan el bosque, porque no hay un Furi que aporte sensatez.
Afortunadamente, el final de El espíritu del bosque, después de los títulos de crédito, recuerda los versos de Antonio Machado: “Al olmo viejo, herido por el rayo, y en su mitad podrido, con las lluvias de abril y el sol de mayo, algunas hojas verdes le han salido”. Mientras hay vida hay esperanza.
Juan Carlos Cubeiro, director de Eurotalent Publicado en Expansión y Empleo, el 26 de Septiembre de 2008

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